Destacado erudito y santo, San Beda el Venerable fue honrado en vida. León XIII lo declaró doctor de la Iglesia.
San Beda el Venerable fue un santo británico nacido el año 672, uno de los pocos honrados en vida. A temprana edad, Beda fue confiado al abad del Monasterio de San Pablo en Jarrow, donde, gracias a su genio y a la instrucción de monjes ilustrados, se convirtió en un religioso destacado de su tiempo, dominando ciencias como la filosofía natural, astronomía, aritmética, gramática, historia eclesiástica, vidas de los santos y las Sagradas Escrituras.
Ordenado sacerdote a los 30 años —había sido diácono a los 19— Beda se dedicó al estudio, escritura y enseñanza hasta el día de su muerte. Además de copiar numerosos libros, escribió 45 propios, incluyendo 30 comentarios sobre la Biblia. Su «Historia Eclesiástica del Pueblo Inglés» es de importancia decisiva en la historiografía.
A pesar de ser solicitado por reyes y el Papa Sergio, Beda permaneció en su monasterio, excepto por unos meses en la escuela del arzobispo de York. Murió en 735. Durante su última Cuaresma, trabajó en la traducción del Evangelio de San Juan al inglés, completándola el día de su muerte. El Papa León XIII lo declaró doctor de la Iglesia en 1899. San Beda el Venerable es el santo patrono de los eruditos.
Fuente: Franciscan Media.
Imagen: Fragmento de «San Beda» (primera mitad del siglo XVII), por Bartolomé Román.