Sus funerales serán en la Parroquia Santa María, madre de la iglesia de Quilpué, parroquia en la que sirvió en los últimos diez años.
A las 15 horas, se realizarán los funerales del diácono permanente Jorge Pizarro Contreras, quien falleció este martes.
En caso de que no pueda asistir, la parroquia dispondrá de la transmisión en su plataforma de Facebook Live.
Posteriormente, será sepultado en el cementerio parroquial San Carlos Borromeo de El Belloto.
El diácono Jorge Pizarro, nació en Valparaíso el 6 de abril de 1934. Sus estudios los realizó en el Liceo coeducacional de Quilpué, al término de los cuales ingresó a la Escuela Normalista de Viña del Mar titulándose de Profesor de Educación Básica.
En Quilpué se le recuerda en sus años como docente de la Escuela n.° 94, formando generaciones de niños y jóvenes. Su servicio Pedagógico lo completo como director de educación para la provincia de San Felipe y los Andes. Posteriormente fue subdirector del Liceo Comercial “Alejandro Lubet Vergara” de Quilpué y director provincial del Tercer Sector de Valparaíso.
Casado con Anita León, también Educadora Normalista, formando su hogar en Pasaje Las Palmas. Padre de cuatro hijos: Jorge, Anita María, Marcela y José.
Fue ordenado diácono permanente el 31 de marzo de 1974 por el obispo de ese entonces, monseñor Emilio Tagle Covarrubias, prestando servicio en diversas comunidades. Además, fue director de la escuela diaconal Felipe Diácono.
Su frase de lucha fue “Hablar a los hombres de Dios y a Dios de los hombres”.
En tanto, el párroco de la parroquia Santa María, madre de la iglesia de Quilpué, padre Winston Hardy, hizo una semblanza del diácono, destacando su espíritu solidario.
“Es fácil que se vengan a la memoria bautizos, matrimonios, celebraciones importantes como pascuas, navidades, celebraciones patrias, y el día a día en los cuales nuestro Diácono Jorge estaba con su compañía chispeante y alegría entre chistes y bromas”.
“Su paso por la escuela Felipe Diácono, su alma de profesor normalista que se reflejaba en su ser”.
“La referencia de portero excelente y que se le escapaban pocos balones”.
“Es muy difícil poder expresar en pocas líneas lo que es: un hombre, profesor, esposo, padre de familia, abuelo, diácono, pero estoy seguro que generaciones podrán expresar una historia que relate de mejor forma lo que los unió a quien fuera Servidor de los hombres y sobre todo de Dios”.
Un abrazo a Sra. Anita y a los suyos que atenúa el dolor de la partida de quien les amó en su vida.
“Estimado Hermano Diácono Jorge Pizarro te llevaremos siempre en nuestros corazones y cada vez que te aparezcas en nuestro baúl de los recuerdos Un Ave María volará al Cielo”, fueron las palabras emitidas por el presbítero.