San Olegario, obispo de Barcelona en el Siglo XII, destacó en la restauración de la provincia eclesiástica de Tarragona y la aplicación de la disciplina canónica.
San Olegario nació en Barcelona entre 1059 y 1061. Educado en la catedral de Santa Cruz de Barcelona, ascendió a prepósito en 1094 y posteriormente se convirtió en Abad del monasterio agustino de San Rufo en Provenza. Nombrado obispo de Barcelona en 1116 por el Papa Pascual II.
En 1118, a solicitud del conde Raimundo Berenguer III, Olegario fue trasladado a la Arquidiócesis de Tarragona, recién reconquistada a los musulmanes. Participó en cuatro concilios y fue nombrado legado a latere para España por el Papa Calixto II.
Olegario destacó en la restauración de la provincia eclesiástica de Tarragona y la aplicación de la disciplina canónica. Falleció el 6 de marzo de 1137 en Tarragona. Sus restos, incorruptos son venerados en un altar de la catedral de Barcelona.
Fuente: Santiebeati.It