Juan Bautista de La Salle, fundador de los Hermanos de las Escuelas Cristianas. Su visión innovadora transformó la educación.
San Juan Bautista de La Salle, nacido en 1651 en Reims, Francia, fue mucho más que un sacerdote. Desde joven demostró una dedicación excepcional a los menos privilegiados. Nombrado canónigo a los 16 años, pronto se enfrentó a la realidad de la pobreza y la falta de educación en su época.
La muerte de sus padres lo llevó a asumir responsabilidades familiares, pero su verdadera vocación lo llevó a fundar escuelas para niños desfavorecidos. Renunció a su comodidad y fortuna para vivir entre los maestros y fundar la comunidad de los Hermanos de las Escuelas Cristianas.
A pesar de la oposición de las autoridades eclesiásticas y educativas, Juan Bautista perseveró. Su visión innovadora transformó la educación, ofreciendo enseñanza gratuita para todos, sin importar su situación económica.
Su legado perdura en la red mundial de escuelas lasalianas. Además de formar maestros y rehabilitar delincuentes, su influencia se extiende a la educación técnica y artística.
Beatificado en 1888 y canonizado en 1900 por el Papa León XIII, De La Salle fue proclamado Patrono de los Educadores Cristianos en 1950 por el Papa Pío XII. Su vida y escritos continúan inspirando a quienes trabajan en la educación, recordándoles la importancia de tratar a los jóvenes con compasión y dedicación.
El 7 de abril de 1719, este visionario educador falleció, dejando un legado que sigue transformando vidas en 79 países.
Fuente: Hermanos de las Escuelas Cristianas